miércoles, 15 de diciembre de 2010

El Mito de Sísifo

Extractos del Mito de Sísifo de Albert Camus:

Veo a ese hombre volver a bajar con paso lento pero igual hacia el tormento cuyo fin no conocerá. Esta hora que es como una respiración y que vuelve tan seguramente como su desdicha, es la hora de la conciencia. En cada uno de los instantes en que abandona las cimas y se hunde poco a poco en las guaridas de los dioses, es superior a su destino. Es más fuerte que su roca. Si este mito es trágico lo es porque su protagonista tiene conciencia.

¿ En qué consistiría, en efecto, su castigo si a cada paso le sostuviera la esperanza de conseguir su propósito?. El obrero actual trabaja durante todos los días de su vida en las mismas tareas y ese destino no es menos absurdo.

Pero las verdades aplastantes perecen al ser reconocidas.

La dicha y lo absurdo son dos hijos de la misma tierra.

Si hay un destino personal, no hay un destino superior.

Este universo en adelante sin amo no le parece estéril ni fútil. Cada uno de los granos de esta piedra, cada trozo mineral de esta montaña llena de oscuridad forma por sí solo un mundo.

viernes, 26 de noviembre de 2010

Los Animales

Creo que podría transformarme y vivir con los animales.
¡Son tan apacibles y dueños de sí mismos!
Me paro a contemplarlos durante tiempo y más tiempo.
No sudan ni se quejan de su suerte,
no se pasan la noche en vela, llorando por sus pecados,
no me fastidian hablando de sus deberes para con Dios.
Ninguno está insatisfecho, a ninguno le enloquece la manía de poseer cosas.
Ninguno se arrodilla ante otro, ni ante los congéneres que vivieron hace miles de años.
Ninguno es respetable ni desgraciado en todo el ancho mundo.

WALT WHITMAN

viernes, 8 de octubre de 2010

Stevenson por Chesterton

Se fortificó en el cuarto de los niños. Y lo hizo por una especie de instinto de que allí había existido una maravilla que los puritanos no podían prohibir ni los pesimistas negar. pero fue una historia extraña. Stevenson había preguntado : "¿Puede un hombre ser feliz?", y la respuesta fue: "Sí, antes de convertirse en hombre."

G. K. Chesterton

viernes, 5 de febrero de 2010

Sobre Héroes y Tumbas

Extracto de la extraordinaria obra del argentino Ernesto Sabato, Sobre Héroes y Tumbas que ocupa una posición indiscutible dentro de las grandes obras de la literatura latinoamericana.

"Ya que no bastan - pensaba - los huesos y la carne para construir un rostro, y es por eso que es infinitamente menos físico que el cuerpo: está calificado por la mirada, por el rictus de la boca, por la arrugas, por todo ese conjunto de sutiles atributos con que el alma se revela a través de la carne. Razón por la cuál, en el instante mismo en que alguien muere, su cuerpo se transforma bruscamente en algo distinto, tan distinto como para decir ´no parece la misma persona´, no obstante tener los mismo huesos y las misma materia que un segundo antes."

martes, 19 de enero de 2010

Tartufo

Lectura recomendada: Tartufo del escritor francés Moliere (1622-1673)

Tomado de la wikipedia.

Argumento:

Orgón es un personaje bastante importante que ha caído bajo la influencia de Tartufo (Tartuffe es el nombre dado a la trufa u hongo escondido bajo tierra), un hipócrita beaturrón, que además es bastante torpe. De hecho, los únicos que no se han dado cuenta de la verdadera naturaleza de Tartufo son Orgón y su madre. El mediocre y ladino Tartufo exagera la devoción y ha llegado a ser el director espiritual de Orgón. Este aventurero está tratando, además, de casarse con la hija de su benefactor (Orgón), al tiempo que trata de seducir a la segunda esposa de éste, Elmira, mucho más joven que su marido. Una vez desenmascarado, tratará de aprovecharse de unas donaciones (firmadas) que Orgón le ha transmitido para tratar de echar a éste de su propia casa. Va incluso ante el rey, pero éste, recordando los antiguos servicios que Orgón le prestó, anula dichos papeles y hace que Tartufo sea detenido.

Puedes bajar el pdf de la obra apuntando aquí: Tartufo.pdf

jueves, 7 de enero de 2010

América Soñada

Extractos de Furia de Salman Rushdie:

"¿Cómo habría podido persuadirse de que aquel burgo loco por el dinero bastaría para salvarlo, aquella Gotham en donde jokers y pinguinos se desmadraban sin ningún Batman (ni siquiera Robin) que frustrara sus planes, aquella Metrópolis hecha de criptonita en la que ningún Superman se atrevía a poner pie, en donde se confundía la riqueza con los ricos y el placer de poseer con la felicidad, en donde la gente llevaba una vida tan pulida que las grandes verdades ásperas de la cruda existencia habían sido alisadas y abrillantadas, y en la que las almas humanas habían vagado tan separadas durante tanto tiempo que apenas recordaban cómo tocarse; aquella ciudad cuya legendaria electricidad alimentaba las barreras eléctricas que se estaban levantando entre hombres y hombres y también entre hombres y mujeres? Roma no cayó porque sus ejercitos flaquearan sino porque los romanos se olvidaron de lo que significaba ser romano. ¡Podría ser que aquella nueva Roma fuera en realidad más provinciana que sus provincias; podrían haber olvidado aquellos nuevos romanos qué y cómo estimar, o lo habían sabido alguna vez? ¿Eran todos los imperios tan indignos, o era aquel especialmente tosco? No había ya nadie en aquel empeño bullicioso y abundancia material dedicado a la explotación profunda de la mente y el corazón? Oh América Soñada, ¿terminaría la búsqueda de la civilización en la obesidad y la trivialidad, los Roy Roger y Planet Hollywood, en US Today y E!; en la codicia de los concursos televisivos de un millón de dólares o el voyeurismo documental; o en el eterno confesionario de Ricki y Oprah y Jerry, cuyos invitados se asesinaban entre sí después del show; o en un chorro de ofensivas comedias a cual más tonta destinadas a jóvenes que se sentaban en la oscuridad gritando su ignorancia a la pantalla; o en las mesas inaccesibles de Jean-Georges Vongerichten y Alain Ducasse? ¿Qué paso con la búsqueda de llaves escondidas que abrían las puertas de la exaltación? ¿Quién demolió el Capitolio y lo sustituyó por una fila de sillas eléctricas, esas traficantes de la democracia de la muerte, en donde todos, los inocentes, los deficientes mentales y los culpables podían morir uno al lado de otro? ¿Quién pavimentó el Paraiso y construyó un estacionamiento? ¿Quién se conformó con un George W. Gush agorero y un Al Bore embushcado?"...

"Sí, América lo había seducido; sí, su resplandor lo había excitado y también su inmensa potencia, y esa seducción lo ponía en situación comprometida. Aquello a lo que se oponía tenía que combatirlo también dentro de sí. Le hacía querer lo que prometía y eternamente negaba. Todo el mundo era ahora americano, o al menos estaba americanizado: indios, iranías, uzbekos, japoneses, liliputienses, todos. América era el terreno de juego del mundo, su reglamento, árbitro y balón. Hasta el antiamericanismo era un americanismo disfrazado, al admitir, como admitía, que América era el único juego de la ciudad y la cuestión americana el único negocio al alcance; y por ello, como todo el mundo, Malik Solanka recorría ahora sus altos pasillos con la gorra en la mano, como suplicante en aquella fiesta; pero eso no quería decir que no pudiera mirar a la cara."

Garbageland, la decadencia de la sociedad de consumo


Residuos humanos arrojados a una isla, condenados a habitar entre los desperdicios generados por los grandes centros de consumo. Estos marginados, por su escasa o nula capacidad de consumo, deben habitar bajo tierra ya que el sol produce enfermedades cancerosas en la piel de quienes se exponen a él por largo rato.

Algunos "privilegiados", entiéndase, aquellos consumidores que forman parte de la estructura del mercado, practican un deporte muy peculiar, cazar a los seres humanos que habitan en la isla basurero.

En esta visión decadente del futuro de la sociedad de consumo, el escritor cubano Juan Abreu, nos muestra un mundo donde los recursos naturales escasean, donde la contaminación ha cambiado los patrones de vida, donde las empresas trasnacionales dominan las relaciones interpersonales, y dictan a cada persona el cómo vivir, el que consumir. Los grupos marginados son deportados a una isla donde deben sobrevivir entre los desechos producidos por las ciudades.

En esta ficción futurista titulada Garbageland, que hasta el momento forma parte de una trilogía con otras dos publicaciones Orlán Twentyfive y El Masturbador, las reglas del mercado son reglas divinas, las empresas dominan la vida de los seres humanos, sustrayendo el papel del Estado y conformándose en una nueva Religión, el Nuevo Orden Mundial valora a las personas por su capacidad de consumo, y los medios en su totalidad se han convertido en sacerdotes difusores de la palabra (propaganda) de la nueva religión, la del mercado.

Para aquellos interesados, recomiendo la lectura de esta novela, además de pasar unas horas entretenidas, estoy seguro que les pondrá a reflexionar sobre un futuro no muy lejos del presente que ya estamos viviendo, el presente de la "globalización del mercado". En fin, considero que Garbageland nos muestra los posibles efectos que pueden generar las políticas de libre mercado, y su "invisible mano", en un mundo groseramente consumista.

Grita Cuando te Quemes

"Camus hablaba de angustia y el terror de la miserable condición del Hombre, pero hablaba de ello de un modo tan florido y agradable...su lenguaje...uno tenía la sensación de que las cosas no le afectaban ni a él ni a su forma de escribir. En otras palabras, las cosas igual podrían ir sobre ruedas. Camus escribía como un hombre que acabara de darse una buena cena con bistec, patatas fritas y ensalada, todo regado con una botella de buen vino francés. Tal vez la humanidad sufriera; él no. Tal vez fuera un sabio, pero Henry prefería a alguien que chillara cuando se quemaba"

Extracto del relato del escritor maldito Charles Bukowski "Grita Cuando te Quemes" que aparece en el libro titulado "Música de Cañerias".