jueves, 7 de enero de 2010

Garbageland, la decadencia de la sociedad de consumo


Residuos humanos arrojados a una isla, condenados a habitar entre los desperdicios generados por los grandes centros de consumo. Estos marginados, por su escasa o nula capacidad de consumo, deben habitar bajo tierra ya que el sol produce enfermedades cancerosas en la piel de quienes se exponen a él por largo rato.

Algunos "privilegiados", entiéndase, aquellos consumidores que forman parte de la estructura del mercado, practican un deporte muy peculiar, cazar a los seres humanos que habitan en la isla basurero.

En esta visión decadente del futuro de la sociedad de consumo, el escritor cubano Juan Abreu, nos muestra un mundo donde los recursos naturales escasean, donde la contaminación ha cambiado los patrones de vida, donde las empresas trasnacionales dominan las relaciones interpersonales, y dictan a cada persona el cómo vivir, el que consumir. Los grupos marginados son deportados a una isla donde deben sobrevivir entre los desechos producidos por las ciudades.

En esta ficción futurista titulada Garbageland, que hasta el momento forma parte de una trilogía con otras dos publicaciones Orlán Twentyfive y El Masturbador, las reglas del mercado son reglas divinas, las empresas dominan la vida de los seres humanos, sustrayendo el papel del Estado y conformándose en una nueva Religión, el Nuevo Orden Mundial valora a las personas por su capacidad de consumo, y los medios en su totalidad se han convertido en sacerdotes difusores de la palabra (propaganda) de la nueva religión, la del mercado.

Para aquellos interesados, recomiendo la lectura de esta novela, además de pasar unas horas entretenidas, estoy seguro que les pondrá a reflexionar sobre un futuro no muy lejos del presente que ya estamos viviendo, el presente de la "globalización del mercado". En fin, considero que Garbageland nos muestra los posibles efectos que pueden generar las políticas de libre mercado, y su "invisible mano", en un mundo groseramente consumista.

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